La obra presenta un mundo de fantasía en el que predomina el amarillo y los colores de la gama cálida. Espirales y estructuras alargadas forman una jardín de corte infantil con fondo de atardecer con nubes. En los árboles y en el cielo aparecen criaturas de forma casi animal. Son similares a reptiles voladores o dragones, animales mitológicos y fantásticos. Arauco es una ciudad chilena, nacionalidad de la autora.