Serie de 22 fotografías enmarcadas en marcos antiguos con cristal de distintos tamaños y colores.
Definición del artista: "Se trata del paso del tiempo, de la huella, una mirada al pasado a través de una serie de retratos de fantasmas que se presentan a modo de fotografías de recuerdos". Instalación compuesta por 22 fotografías enmarcas de diversa naturaleza y dimensiones. Están distribuidas en dos bloques, el mayor se compone de 17 obras colgadas en la pared sin seguir una simetría o un orden establecido. Hay un cierto equilibrio producido por una obra de mayor tamaño en el centro de la composición, en la parte superior, que lo divide en dos bloques por medio de obras de menor tamaño. Sobre una repisa se colocan 6 obras agrupadas en parejas. Tanto la repisa como la pared comparten las mismas características, siendo un blanco uniforme que crea visualmente una unidad en los soportes.