Pintura donde se representan diversas edificaciones superpuestas. En el centro de la composición hay una portada cuyo contorno es escalonado. A ambos lados hay dos edificios de planta circular, sin cubierta. Hay una amplia escalinata de entrada hacia ellos. Detrás se agrupan varios edificios con cubierta a dos aguas. Se aprecian tres chimeneas con doble salida. Tras los edificios hay varios árboles. En primer plano se distingue la silueta de un gato negro, cuya cola crea una línea fina ondulada de gran tamaño. En el cielo se distingue una luna decreciente. La pincelada es rápida y las tintas son planas. El cromatismo consta de siete colores aplicados en determinados lugares, el blanco para las fachadas, el amarillo para los tejados, el rojo para las cornisas y los suelos, el naranja para el terreno, el rosa para las hojas de los árboles y el cielo, y el azul para marcar las sombras. El terreno está decorado con líneas sinuosas de color amarillo.